Aracena revive la fiesta del fútbol base en el Torneo de fútbol 7 “Gruta de las Maravillas”
Javier Moya Rufino / Aracena
La Unión Deportiva Aracena ha celebrado en colaboración con el Patronato Municipal de Deportes de Aracena su habitual Torneo Gruta de las Maravillas en el campo municipal de fútbol de San Jerónimo. Una mañana de sábado muy agradable en la Sierra; con frío inicial y calor al mediodía en la despedida.
El torneo ha tenido un año más a tres escuelas de fútbol base de la provincia mediante un triangular de fútbol 7 en las categorías de benjamín y alevín, quiénes se han ido enfrentando mutuamente entre ellos. En concreto las escuelas de Aracena como anfitriona, la de El Campillo y Zalamea la Real, las dos ultimas desde la Cuenca Minera para reunir a más de sesenta niños. A destacar una vez más, y ya no es noticia, la amplia participación de niñas en las escuelas de fútbol base con una naturalidad y soltura con el balón sorprendente. De hecho ha sido el año que más pequeñas han disputado el torneo.
Una cita que ha contado con la colaboración de varios miembros del club local de fútbol; junta directiva, jugadores y entrenadores. En particular para realizar el arbitraje de los partidos y estar siempre a disposición de todas las escuelas. Incluso había un esmerado servicio de bar, muy concurrido durante la mañana por jóvenes y familiares.
A las diez de la mañana comenzaban los dos primeros partidos en sendos campos de fútbol 7. Así pues, las tres escuelas disputaron dos encuentros en las dos categorías participantes, aunque de Aracena ambos conjuntos eran alevines. Finalmente, se enfrentaron a la vez las dos escuelas invitadas: El Campillo y Zalamea la Real.
A la terminación, pasadas las doce del mediodía, cada miembro de las escuelas recibía una gorra conmemorativa del Patronato Municipal de Deportes, un bocadillo y un refresco para mitigar el cansancio acumulado. En este torneo nunca ha habido trofeos por clasificación porque lo importante es la participación y la educación deportiva, aunque en otras ediciones se entregaba una distinción conmemorativa alusiva al pueblo.
La escuela de fútbol base de Aracena goza de muy buena salud con una amplia presencia de jóvenes dirigidos tanto por responsables del propio patronato municipal como entrenadores del club local de cara a la formación de los chavales, como se ha podido ver en el torneo.
Por supuesto cada niño quería la victoria, la ilusión por marcar un gol y la celebración en cada caso era irrepetible. Las caras de felicidad eran gratificantes, y también había alguna otra más desangelada por la derrota o algún fallo de menor importancia. Los técnicos corregían todos los detalles y están encima de los niños durante el juego.
Finalmente, momento de la despedida y los agradecimientos antes de la vuelta a casa, esperando la siguiente edición en 2013.
* FOTOS EN LAS 3 ENTRADAS SIGUIENTES.
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