El Medina Arsena consigue una agónica victoria pese a las dificultades
Los locales remontan un partido con uno menos donde se adelantaron en un princpio. El Almonte lanzó dos tiros al palo que pudieron sentenciar a su favor
U.D. MEDINA ARSENA: Eze, Maroto, Blas, Careto, Calvo, Francis (David Hermoso min. 80), Jacob, Jairo, Antoñito (David Midgley min. 56), Fernandito (Bogue min. 65) y José Mari.
ALMONTE: Manolo, Barto, Cristian (Abad min. 67), Juampe, Juanfran, Nando, David (Jurado min. 48), Gabo, Sebas, Sergio y Carlos.
ÁRBITRO: el árbitro estuvo mal. Claro fuera de juego en el primer gol del Almonte. Tanto esta jugada como la del penalti las pitó en contra de su auxiliar. La segunda amarilla a Blas la sacó tras pitar una falta que él mismo señaló a favor de los locales y como no se acordaba de la primera (jugada del penalti) tuvo que consultar al asistente. Por los locales amonestó a Jacob, Antoñito, Francis y Blas expulsado con doble amarilla. Por los visitantes a Carlos y Juanfran.
GOLES: 1 – 0 Antoñito min. 12. 1 – 1 Sebas min. 25. 1 – 2 Sebas (penalti) min. 33. 2 – 2 José Mari min. 53. 3 – 2 José Mari min. 85.
INCIDENCIAS: el San Jerónimo tuvo una buena entrada de público con una grada más exaltada y desquiciada de lo habitual por la actuación arbitral.
Javier Moya Rufino / Aracena
La Unión Deportiva Medina Arsena consiguió una importante victoria ante un buen conjunto visitante que lanzó dos tiros al palo. De forma agónica, remontando un resultado en contra y con un jugador menos se quedaron los tres puntos en casa que lo acercan más al objetivo de la salvación. Un partido vibrante con un juego muy directo hacia ambas porterías que encandilaron a la afición, muy abroncada contra el colegiado porque entendía que las decisiones le perjudicaban a su equipo. La polémica llegó con el primer gol en un más que aparente fuera de juego donde obvió la opinión de su auxiliar. La siguiente en el penalti que adelantaba a los almonteños, muy protestado por el conjunto serrano, con una tarjeta a Blas que a la postre sería definitiva en la segunda mitad con la expulsión. Precisamente, se dio en una jugada en el 65 donde en un trance entre Blas y un rival hace que éste suelte el brazo primero y Blas replique, realizando después un feo gesto contra el contrario con tintes de nerviosismo y perder los papeles en el joven lateral aracenense. Curiosamente, el colegiado pita la primera falta y dirige su brazo hacia la portería donde atacaba el Medina, para luego al expulsar al jugador rectifica y cambiar de opinión de forma sorprendente. El criterio de las tarjetas no fue muy equitativo y después se dieron jugadas habituales en el terreno de juego que desarbolaron ya a la afición y conjunto local.
La primera parte comenzó con alternancias en el juego que llevaron al equipo de Cano adelantarse en el minuto 12 gracias a una jugada donde Fernandito centra bien al área para que Antoñito remate de cabeza al fondo de la red de forma inapelable. Un minuto después José Mari tuvo la sentencia donde solo ante el portero consigue rebasarlo pero lanza alto al lateral de la portería. En el 14 Sebas solo ante Eze hace la réplica, pero el guardián del San Jerónimo salva el empate con una gran parada en el mano a mano. En el 25 Sebas empata solo ante el cancerbero en un más que posible fuera de juego. En el 33 llega el penalti de Blas que Sebas lanza raso engañando con maestría a Eze. Antes del descanso un tiro lejano de Fernandito se marcha escorado al palo izquierdo de Manolo.
En la segunda parte el Medina salió con mucha fuerza y ganas de remontar el partido, pero el Almonte llegaba arriba con jugadas al contraataque y de mucha velocidad por banda que achicaban mucho a la defensa local cambiada por la ausencia de A.Martín. Incluso el Almonte pudo sentenciar el partido con dos lanzamiento al palo; el primero en un fuerte chut que se estrella en la cruceta para el silencio de la grada y el segundo en el 56 con un cabezazo que da en el larguero. Sin embargo, en una rápida jugada el Medina empata gracias a un gol de preciosa vaselina de José Mari en el 53. A partir de este momento la lucha, tensión y garra por todos los balones era la nota predominante. Todos los jugadores daban lo máximo para llevarse la victoria a cada bando. Todo ello provocando claras ocasiones con el partido roto y el cansancio haciendo mella pese a la entrada de jugadores de refresco desde el banquillo. En el 65 vendría la expulsión de Blas ya mencionada que dejó al Medina con diez faltando más de veinte minutos para el final.
Y en el 85 en un gran pase al hueco hace que José Mari se escore a la derecha y trancas y barrancas cuando se alejaba de la portería sacara el pie y con un gran tiro haría el delirio de la parroquia cebollera con la definitiva victoria.
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